SILUETAS HISTÓRICAS ZWEI
Obras de personajes tratados en este documento:
Hamp, Pierre, Alain - Chartier, Émile-Auguste
Descaves, Lucien. Barbusse
Henri, Guilloux, Louis. Poulaille, Henry.
Romains, Jules. Kodjo -
Grandvaux, Séverine. Auffret, Séverine .
Chastenet, Jacques.
Queneau, Raymond . Barrès.
Salomon, Ernst von.
Mazeline, Guy. Knut Hamsun, Payr, Bernhard.
Doriot, Jacques. Burrin,
Philippe. Herriot, Edouard.
Romain Rolland, Henri
Barbusse, Bertrand de Jouvenel,
Guérin, Daniel. Philippe
Lamour, André Breton, Paul Verlaine,
Gabriel Pén, Pierre Mendes-France, Francoise Mitterrand,
Valery Giscard d'Estaing,
Pierre Mendes-France,
Jacques Chaban Delmas,
Jacques Chirac, Maurice Barrès,
L. Bloy, B. d'Aurevilly
Jean Guéhenno
Nacionalidad Francesa
Escuela Normal Superior de París
Ocupación: Crítico literario, autobiógrafo y escritor
Miembro de Academia Francesa (desde 1962)
Distinciones: Comendador de la Legión de Honor. Cruz de guerra 1914-1918
Premio Mundial Cino Del Duca
Medalla de la Resistencia.
Jean Guéhenno fue
el seudónimo de Marcel-Jules-Marie Guéhenno (1890 - 1978), escritor y crítico literario francés
nacido en Fougères y fallecido en París. Fue miembro de la Academia Francesa a
la que fue electo en 1962 para el asiento número 9.1
Datos biográficos
Nacido en Fougères (Ille-et-Vilaine), Jean Guéhenno
cuenta en su libro Changer la vie su infancia de pobreza. Hijo de un zapatero
bretón se vio obligado a dejar la escuela a los 14 años para trabajar como
empleado en una fábrica de zuecos (zapato con suela de madera), lo que no
impidió que siguiera estudiando por su cuenta después de las jornadas de
trabajo. Logró así su bachillerato y ganó el concurso para ingresar en la
Escuela Normal Superior de Francia y, después, la agregación, que le abrió las
puertas para ejercer la enseñanza secundaria.
Sirvió a su país en la Primera Guerra Mundial como
oficial de infantería. Jean Guéhenno fue después profesor de khâgne en
literatura en los liceos Lakanal, Henri-IV y Louis-le-Grand. Concluyó su
carrera de educador en el Ministerio de la educación Nacional como inspector
general.
Jean Guéhenno se dedicó también a la crítica literaria
y se especializó en la obra de Jean-Jacques Rousseau. En varias de sus obras
propuso un humanismo original: como en el caso de L’Évangile éternel (1927),
Caliban parle (1928), Jean-Jacques en marge des Confessions (1948),
Jean-Jacques, roman et vérité (1950), Jean-Jacques, grandeur et misère d’un
esprit (1952), La Foi difficile (1957), Jean-Jacques, histoire d’une conscience
(1962), Caliban et Prospero (1969).
Fue este humanismo el que le sirvió de guía en su
devenir político entre las dos guerras. Firmó junto con Alain, Lucien Descaves,
Louis Guilloux, Henry Poulaille, Jules Romains y Séverine, entre otros, la
petición contra la ley sobre la organización general de la nación en caso de
guerra que no permitía la independencia intelectual y la libertad de opinión.
Esta petición apareció en el número 15 de la revista Europe de la que fue
director de 1929 a 1936. Después fundó el semanario Vendredi. Participó en 1931
en el cuarto curso universitario de Davos, con muchos otros intelectuales
franceses y alemanes. Durante la Segunda Guerra Mundial se unió a la
Resistencia. En ese entonces, continuó su actividad literaria bajo el seudónimo
de Cévennes.
Como redactor en el Figaro, periódico de derecha
después de 1945, se mantuvo fiel a la exigencia moral y al rigor que marcaron
su juventud y que se encuentran expresados en su libros autobiográficos: Journal
d'un homme de 40 ans (1934), Journal des années noires, 1940-1944 (1947),
Carnets du vieil écrivain (1971).
Jean Guéhenno fue electo a la Academia Francesa el 25
de enero de 1962. Fue recibido el 6 de diciembre de 1962 por Jacques Chastenet,
siendo la suya la primera ceremonia de recepción de la Academia
"renovada". Su elección y recepción en la Cúpula suscitó el siguiente
homenaje de François Mauriac:
« Aunque se piense mal de la Academia, en el caso de
una vida ejemplar como la de Guéhenno, ella aporta una consagración
irremplazable. El pequeño obrero bretón quien por la potencia de su espíritu y
por su perseverancia llegó a ser maestro eminente, alto funcionario y sobre
todo escritor, dibuja ante nuestros ojos una serie de estampas en la que la
Cúpula (se refiere a la del Instituto de Francia) ocupa la última casilla. »
Jean Guéhenno murió en París el 22 de septiembre de
1978.
Il faut lire ou relire Jean Guéhenno
Par Jean-Pierre Rioux, Historien — 19 octobre 2016 à
17:11
Le penseur et résistant, mort en 1978, a disparu de
l’horizon alors qu’il parle avec éloquence des «haines et des peurs» qui nous
travaillent. Debout pour ne pas se
renier ?
Il faut lire
ou relire Jean Guéhenno
Par
nos temps angoissés, pourquoi ne pas lire un peu Jean Guéhenno (1890-1978),
l’oublié aux bouquins introuvables ? Son humanisme est rance, sa morale civile
d’un autre âge, et André Gide a osé dire un jour qu’il parlait du cœur comme
d’autres parlent du nez. Et pourtant, il parle encore ! Car l’enfant d’un
ouvrier de Fougères qui, atteste-t-il dans Changer la vie. Mon enfance et ma
jeunesse (Grasset, 1961), avait entendu Jean Jaurès dire en 1906 aux grévistes,
là-bas, qu’il fallait d’abord apprendre à lire le réel et à dire le vrai, le
vieil antifasciste qui a tant salué le Front populaire, le vieux pédago, pour
khâgneux sages, nous lance encore quelques apostrophes bonnes à prendre.
Para
nuestro tiempo de ansiedad, ¿por qué no lee un poco de Jean Guéhenno
(1890-1978), Olvidaron encontraron los libros? Su humanismo es rancio, su moral
civil, de otra época, y André Gide se atrevió a decir un día que habló desde el
corazón como otros hablan de la nariz. Sin embargo, todavía habla! Para el hijo
de un trabajador de Fougeres, que atestigua el cambio en la vida. Mi infancia y
juventud (Grasset, 1961), había oído Jean Jaurès en 1906 decir a los
huelguistas, allí, primero tuvieron que aprender a leer la realidad y, a decir
la verdad, el viejo fascista que tanto aclamaron el Frente Popular, el viejo
pédago para la escuela normal sabiamente todavía nos lanza algunas buenas
citas.
Dans
la Foi difficile (Grasset, 1957), il a dit sa quête de l’ouverture à l’Autre
qui récusera l’égoïsme identitaire : «Méfiez-vous des gens, des partis, des
doctrines qui vous promettent tout et ne vous demandent rien. […]. N’acceptez
ni de haïr ni d’avoir peur. La haine et la peur ne vous feraient jamais qu’une
petite place misérable où vous auriez bientôt honte et où vous respireriez mal.
Ne pensez pas à vous sauver seuls. N’imitez pas. […]. Respirez l’air de ce
pays. Tâchez d’être vous-mêmes, mais à la mesure du monde et obsédés par son
tourment. Faites la preuve qu’une fois encore notre pensée et notre langue
peuvent accueillir et porter l’univers.»
Car
même aux pires moments du doute, il faut tenir pour la vie contre la mort,
puisque «la vie est une méditation de la vie elle-même tant qu’elle dure, et
une action» ; tenter une action en intelligence et en justice, comme chez Albert
Camus ou Emmanuel Mounier. Mieux : une action en vérité. Parler vrai, écrire
vrai, vivre vrai en luttant pour le vrai, le voici qui endosse «la vérité vous
rendra libre» de l’Evangile. Voici, droit dans ses bottes, le fils du menu
peuple breton devenu professeur et écrivain, l’enfant de la méritocratie
républicaine qui a franchi ce qu’il appelle «la ligne de la sécurité»
matérielle qui sépare les hommes : debout, dressé, pour ne pas se renier.
Rouvrons
la Mort des autres (1968), où il dit sa révolte après la Grande Guerre : «Il
nous semble parfois que nous avons perdu notre monde, que la terre n’est plus
notre patrie, que nous n’y trouvons plus notre place. Le vieux Chateaubriand
craignait cette "société universelle" en train de se faire. Il avait
trop de plaisir à être triste et prophétisait : "Comment trouver place sur
une terre agrandie par la puissance d’ubiquité, et rétrécie par les petites
proportions d’un globe souillé partout ?" Nous ne changerons pas de
planète. La terre n’est pas le paradis, mais nous ne pouvons aimer qu’elle, et
nous lui resterons fidèles. Nous retrouverons notre
chemin. Nulle autre ressource qu’en nous-mêmes.»
Et
pensons à cette fin de Sur le chemin des hommes (Grasset, 1959) : «La grande
masse de l’humanité végète désormais dans une sorte de pénombre ; elle a assez
de lumières pour que les inquiétudes de la justice soient en elle déjà
éveillées ; elle n’en a pas assez pour s’en remettre à la seule raison pour la
réaliser. Elle est impatiente. Que les pharisiens prennent garde ! […].
Les
violences désespérées n’interviennent que dans ces trous orageux de l’histoire
où ce qui est déjà dans leur cœur exigence passionnée n’est pas encore dans
leur esprit une idée claire. Tout n’est peut-être autour de nous si trouble et
si confus que parce que la foi en la raison humaine n’est pas encore assez
active. Il n’est pas d’autres salut que l’amour de la vérité.»
Il existe des Amis de Jean Guéhenno, 17, rue de La
Rouërie, Fougères (35300).
Patrick Modiano
El escritor francés obtuvo hoy el Nobel de Literatura
2014. Aquí un repaso por su vida y obra
09.10.2014 / 07:32 am
Redacción
Cultura (EFE)
Nacido en 1945, Patrick Modiano culmina con el Premio
Nobel de Literatura 2014 una carrera en la que también ha ganado los galardones
más importantes de su país, el Goncourt y el Gran Premio de novela.
Hijo de una actriz belga -Louisa Colpjin- y un
empresario italiano -Alberto Modiano-, se crió entre Francia e Italia, y su
infancia estuvo marcada por la muerte por leucemia de su hermano mayor, Rudy, a
la edad de 11 años, a quien estaba muy unido y a quien dedicó todas sus obras
entre 1967 y 1982.
Tras acabar sus estudios en la ciudad de Annecy,
decidió no entrar en la universidad para dedicarse a la escritura.
Sus inicios estuvieron marcados por su relación con
Raymond Queneau, autor de "Zazie en el metro", amigo de su madre y
que le tomó bajo su protección, además de ayudarle a terminar el bachillerato.
A partir de 1962, una vez que decide no asistir a la
universidad, se dedica a sobrevivir vendiendo libros . En esa época pierde el
contacto con su padre, con quien volvería a hablar en 1966 brevemente para
cortar después todo contacto con su progenitor.
INICIO DE SU OBRA
Publicó su primera novela, "El lugar de la
estrella" en 1967 en la editorial Gallimard y con ella gana el premio
Rogier Nimier y desde ese momento se concentra totalmente en la escritura.
En 1970 se casa con Dominique Zehrfuss, con la que
tendría dos hijas, Zina, nacida en 1974, y Marie, en 1978.
Su segunda obra, "La ronda de noche", aparece
en 1969 y la tercera, "Los bulevares periféricos", 1972. Estas tres
primeras novelas conforman una especie de trilogía dedicada a la ocupación nazi
de Francia y en estas historias aparecen personajes reales, como Marcel Proust.
Con "Los bulevares periféricos" consigue el
Gran Premio de la novela de la Academia Francesa, y con "Villa
triste" (1975), el premio de los Libreros.
Entre tanto, en 1974, colabora con Louis Malle en el
guion de "Lacombe Lucien", trabajo por el que recibió una nominación
a un BAFTA del cine británico.
Tras "El libro de familia" (1977) llegaría
una de las obras más importantes de su carrera, "La calle de las bodegas
oscuras" (1978), con la que obtendría el prestigioso Premio Goncourt.
En 1981 se publican "Una juventud" y
"Memory Lane"; en 1982 "Tan buenos chicos", a la que le
siguen "Barrio perdido" (1984); "Domingos de agosto"
(1986); "Los mundos de Catalina" (1988); "Exculpación"
(1988); "El rincón de los niños" (1989) y "Viaje de novios"
(1990).
"Flores de ruina" (1991); "Un circo
pasa" (1992); "Perro de primavera" (1993); "Más allá del
olvido" (1996); "Dora Bruder" (1997); "Las
desconocidas" (1999); "Joyita" (2001); "Accident
nocturne" (2003); "Un pedigrí" (2004); "En el café de la
juventud perdida" (2007); "El horizonte" (2010) y "La
hierba de las noches" (2014) completan la prolífica producción de Modiano.
BIOGRAFÍA POLÉMICA
Con "El horizonte" recibe el Premio Mundial
de la Fundación Simone y Cino del Duca, y al año siguiente se produce una
cierta polémica con una biografía "Oublier Modiano" ("Olvidar a
Modiano"), con la que el autor no está nada de acuerdo porque asegura que
falseaba datos de su vida y utilizaba documentos privados sin autorización.
Más allá de las novelas, se ha dedicado al género de
las entrevistas, como con el libro "Emmanuel Berl, interrogatoire"
(1976) y ha colaborado en la escritura de guiones de cine, tanto de
adaptaciones de sus propias obras, como en el filme "El perfume de
Yvonne", basado en "Villa Triste", como con historias
originales, como "Bon voyage".
En el año 200 recibió el Gran premio de literatura
Paul-Morand por el conjunto de su obra.
Georges Valois
Georges Valois, mort pour la France, de son vrai nom Alfred-Georges Gressent (1878 – 1945), était un homme politique français. Recherchant une nouvelle forme d'organisation économique et sociale ainsi que la synthèse du national et du social, il a oscillé entre les radicalités de gauche et de droite. Arrêté à l'Hôtel d'Ardières, aux Ardillats, par la Gestapo le 18 mai 1944, il meurt du typhus à Bergen-Belsen en février 1945.
L'Hôtel
d'Ardières était une structure qu'il avait achetée pour développer ses ultimes
activités, dont la Résistance, et qui était gérée de manière coopérative par
l'« Association des amis du Val d'Ardières »1.
Biographie
Issu
d'une famille paysanne et ouvrière, Georges Valois est né le 7 octobre 1878 à
Paris2. Son père est un Normand venu s'installer à Montrouge exercer la
profession de boucher. Il meurt cependant accidentellement peu après la
naissance de son fils3.
Débuts
à gauche
Georges
Valois milite d'abord dans des mouvements anarchistes, et collabore au journal
L'Humanité nouvelle. Il devient le disciple de Georges Sorel, théoricien du
syndicalisme révolutionnaire, et se lie d'amitié avec le jeune Henri Lagrange.
Convergences
entre Action française et syndicalisme[modifier | modifier le code]
Ayant
découvert seul la monarchie et le catholicisme, Georges Valois adhère à l'été
1906 au mouvement de Charles Maurras dans lequel il voit une arme
révolutionnaire contre le capitalisme. Il suit à l'Action française les
questions ouvrières, et est le maître d'œuvre du Cercle Proudhon (1911), qui
croit mettre en œuvre la politique de Georges Sorel en unissant maurrassiens et
syndicalistes révolutionnaires, mais aboutit à une impasse. On a pu dire que
ses idées furent une préfiguration du fascisme, qui se concrétisera en Italie.
Georges Valois faisait partie de ceux qui veulent pousser au bout la voie
sociale ouverte par l'Action française. Il fut une des chevilles ouvrières de
la Revue critique des idées et des livres, qui regroupa jusqu'à la guerre la
fine fleur des intellectuels maurrassiens.
Le
duc Jean de Guise, prétendant à la Couronne de France de 1926 à 1940, fit appel
à Valois, « ancien anarchiste converti
au royalisme, qui avait rompu avec l'Action française en 1925 », pour servir de
conseiller à son fils Henri (1908-1999), titré comte de Paris en juillet 19294.
De
1923 à 1925, il dirige le mensuel Les Cahiers des États généraux5.
Le
Faisceau, première tentative de fascisme français (1925-1928)
En
1925 avec les capitaux de deux industriels milliardaires, le parfumeur Francois
Coty (1874-1934) et le producteur de cognac Hennessy (Jean Hennessy)4, Georges
Valois fonde un nouveau mouvement, le Faisceau, premier mouvement fasciste non
italien, et un organe de presse, Le Nouveau Siècle, qui échoueront très vite.
Il
s'y oppose au journaliste Léon Chavenon, directeur de L'Information, qui dans
un article du 14 mai 1925 suggère une augmentation rationnelle de la
circulation monétaire, pour susciter une inflation contrôlée, gagée sur la
production future6.
Malgré
l'adhésion de Hubert Lagardelle (venu de la gauche) ou de Marcel Bucard (issu
lui aussi de l'AF, et futur fondateur du Parti franciste, ouvertement
fasciste), le Faisceau disparaît en 1928.
Retour
à gauche (années 1930)[modifier
Par
la suite, Valois crée le Parti républicain syndicaliste. Il change de
disposition en 1934, en lançant le quotidien Nouvel Âge, en lui conservant le
caractère corporatiste qui circule dans les milieux non-conformistes des années
1930. En 1935, il va même jusqu'à demander l'adhésion à la SFIO. Mais, malgré
le parrainage de Marceau Pivert, l'adhésion lui est refusée. Proche du courant
distributiste, il s'engagera dans la Résistance, mais meurt en déportation à
Bergen-Belsen en février 1945.
De
l'anarchisme à l'Action française, du fascisme à son retour vers la gauche et
dans la République, jusqu’à sa mort en déportation, le parcours de Georges
Valois (1878-1945) est emblématique des mutations et des reclassements à
l’œuvre dans la France de l’entre-deux-guerres.
L’Homme
contre l’argent. Souvenirs de dix ans 1918-1928, ouvrage publié en 1928 et
aujourd’hui introuvable devait être réédité. Il peut se découvrir comme une
galerie où se croisent des portraits de figures emblématiques (de Charles
Maurras à Benito Mussolini en passant par François Coty) et des fresques de
milieux très divers (Action française, monde de la presse et de l’édition,
sphères patronales, « jeunes équipes » en voie de formation). Valois propose
aussi le récit de temps forts qui jalonnent sa propre vie en même temps qu’ils
marquent la France de son temps : promotion d’une « économie nouvelle »,
dissidence de l’Action française, naissance d’un « fascisme français », crise
monétaire et stabilisation Poincaré, impasse des solutions traditionnelles pour
adapter la France à une modernisation nécessaire au-delà des voies tracées par
le monde anglo-saxon et l’URSS, nécessité de « nouvelles équipes » pour
concevoir et mettre en œuvre, contre la « dictature » de l’argent, une
troisième voie « réaliste », un « nouvel âge ».
Au-delà
de son itinéraire Valois restitue celui d’un groupe, qui croise cette «
génération réaliste » dont il une figure tutélaire et l’éditeur majeur dans sa
librairie.
(París,
1893 - 1945) Escritor francés. Alumno de la Escuela de Ciencias Política e
influido desde su adolescencia por las obras de los doctrinarios y los poetas
de la acción, Barrès, Kipling y sobre todo Nietzsche, partió para el frente en
1914 con la cabeza llena de sueños de fuerza y de gloria. Participó en
particular en las batallas de Charleroi (La farsa de Charleroi, 1934) y de
Verdun; herido y hospitalizado, escribe entonces sus poemas, reunidos bajo el
título de Interrogation (1917), en los que celebra, como idea superior a la
lucha de las patrias, la fraternidad mística de los guerreros y los héroes.
A
partir de 1920, Drieu La Rochelle intervino en todos los movimientos de su
época, tentado tanto por Maurras como por el comunismo, el surrealismo y los
esfuerzos en favor de la federación europea de la política de Briand. Pero el
tema que domina en su obra es la obsesión de la decadencia: lo hallamos tanto
en sus ensayos (Mesure de la France, 1924), en los que muestra la política
mundial, ya en plena era de las masas, implacable para las viejas
civilizaciones refinadas como la de Francia, como en sus novelas: L'Homme
couvert de femmes (1925), Blèche (1929), Une femme à sa fenêtre (1930), Extraño
viaje (1933), Reveuse bourgeoise (1937), cuadros lúcidos de la burguesía harto
débil, libertina y desesperada de la posguerra.
En
1925 firma un artículo histórico en la Nouvelle Revue Française (N. R. F.) que
lo aleja para siempre de la vanguardia. Mientras tanto, escribe y alterna el
ensayo lírico, Medida de Francia, y la novela analítica, El hombre cubierto de
mujeres. En 1926 se reencuentra con Emmanuel Berl después de haber colaborado
en La Revue hebdomadaire. El año de 1927 marca el año de más intensa amistad de
Drieu con André Malraux, quien permanecerá fiel a su memoria hasta el fin.
Drieu escribe artículos para Bertrand de Jouvenel en La Lutte des Jeunes en
1934, donde conoce al militante Pierre Andreu, su futuro biógrafo. Hace su
profesión de fe en Socialismo fascista: “Este deseo de hacer una política de izquierda
con hombres de derecha.”
Ese
mismo año conoce a Ernst von Salomon en Berlín. Drieu es insuperable en el
diario íntimo y en el testimonio introspectivo. Sus reflexiones decadentistas y
sus descripciones pesimistas del mundo literario y político hacen de él el
mejor memorialista de su tiempo. Esto sin olvidar su talento de periodista que
encontramos en las compilaciones de artículos: Crónica política, 1934-1942 y en
El francés de Europa. En 1936 se adhiere al Partido Popular Francés, (P. P. F.)
dirigido por Jacques Doriot –antiguo comunista– y asiste a su fundación en
Saint-Denis.
Escribe
regularmente en L’Émancipation Nationale, órgano de prensa del partido. En 1939
envía su carta de dimisión al P. P. F. Después de la derrota de 1940, se hace
cargo de la dirección de la N. R. F. También aparecen sus artículos en La Gerbe
de Alphonse de Châteaubriant. En 1943 colabora en el hebdomadario la Révolution
Nationale de Lucien Combelle. Se asume como “socialista europeo” pero se
decepciona rápidamente en virtud de la inminente caída del III Reich. La
concepción de la Europa de Drieu es idealizada y utópica debido a la influencia
de sus lecturas de autores románticos alemanes. Cada vez se interesa más en los
místicos hindúes. Perseguido y viviendo en la clandestinidad,
A
pesar de su obra desigual, su vitalidad y su temperamento único aparecen en
todos sus libros: “Por principio soy un escritor desigual. Lo esencial de lo
que tenía que decir ya lo había señalado, pero apoyando la pluma en una fuerza
malhadada. Hay en mis primeros escritos lo mejor y lo peor. Por una razón de
vida y muerte, debía separar lo mejor de lo peor.” (Escritos de juventud,
1941). Pierre Drieu La Rochelle puede ser considerado el hijo espiritual de
Friedrich Nietzsche y de Maurice Barrès.
*
Como Louis-Ferdinand Céline y su Viaje al fin de la noche.
A
partir de los años treinta, la política tomó una parte preponderante en la obra
de Drieu La Rochelle: luego de realizar vanos esfuerzos por agrupar el
capitalismo inteligente bajo la bandera de unión europea, evolucionó hacia el
fascismo en 1934; su itinerario intelectual puede seguirse en las colecciones
de estudios filosóficos y de artículos políticos como Socialisme fasciste
(1934) y Chroniques Politiques (1942), en obras teatrales como Charlotte Corday
(1944) y Le Chef (1944), en una novela en gran parte autobiográfica como Gilles
Gambier (1939) o en la narración mística L'Homme à cheval (1943).
Louis-Ferdinand
Céline
Louis-Ferdinand Céline (French: [selin] (About this sound listen)) was the pen name of Louis Ferdinand Auguste Destouches (pronounced: [detuʃ]; 27 May 1894 – 1 July 1961), a French novelist, pamphleteer and physician. He developed a new style of writing that modernized French literature. His most famous work is the 1932 novel, Journey to the End of the Night.
Céline
used a working-class, spoken style of language in his writings, and attacked
what he considered to be the overly polished, "bourgeois" language of
the "academy". His works influenced a broad array of literary
figures, not only in France but also in the English-speaking world and
elsewhere in the Western World; this includes authors associated with
modernism, existentialism, black comedy and the Beat Generation.
However,
Céline's vocal support for the Axis powers during the Second World War and his
authorship of some offensively anti-Semitic pamphlets, has meant that his
legacy as a cultural icon is a tangled one.
In
1925, Céline left his family, never to return. Working for the newly founded
League of Nations, he travelled to Switzerland, England, the Cameroons, Canada,
the United States, and Cuba. At this time he wrote the play L'Eglise (1933; The
Church).
In
1926, he visited America, and was sent to Detroit to study the conditions of
the workers at the Ford Automotive Company. Seeing the effects of the
"assembly line" disgusted him. His article described the plant as a
sensory attack on the worker, and how this attack had literally made the worker
part of the machine.
Céline's
best-known work is considered to be Journey to the End of the Night (Voyage au
bout de la nuit, 1932). It violated many of the literary conventions of the
time, using the rhythms and the vocabulary of slang and vulgar speech in a more
consistent and occasionally more difficult way than earlier writers, who had
made similar attempts in the tradition of François Villon (notably Émile Zola).
The
book was a success, but Céline was not awarded the Prix Goncourt despite strong
support. The award went to Guy Mazeline's novel Les Loups (The Wolves). The
voting was controversial enough to become the subject of a book (Goncourt 32 by
Eugène Saccomano, 1999). The first English translation was by John H. P. Marks
in 1934. A more current English translation is by Ralph Manheim in 1983.
In
1936, Céline published Mort à crédit (Death on the Installment Plan), presenting
an innovative, chaotic, and antiheroic vision of human suffering. In it he
extensively used ellipses throughout the text to enhance the rhythm and
emphasise the style of speech. In both these books he showed himself to be a
great stylistic innovator and a masterly storyteller. French author Jean-Paul
Sartre publicly praised Céline at this time.
Antisemitism,
collaborationism and exile
In
1935, British critic William Empson had written that Céline appeared to be
"a man ripe for fascism".[12] Two years later Céline began a series
of pamphlets containing antisemitic themes: Bagatelles pour un massacre
(Trifles for a Massacre) (1937), L'École des cadavres (The School of Corpses)
(1938) and Les Beaux draps (The Fine Mess) (1941). The Fine Mess was last
published in France during the German occupation. These works were
characterized by a virulent antisemitism, racism and bigotry. His Trifles for a
Massacre is an endless litany critical of French Jews and their influence on
French society. Both The School of Corpses and The Fine Mess contain
antisemitic themes.[13]
Before
the war, Céline campaigned for an alliance between France and Nazi Germany. ]
In L'École des cadavres he contrasted Hitler with the French Communist party
leader Maurice Thorez, writing:
Who
is the true friend of the people? Fascism is. Who has done the most for the
working man? The USSR or Hitler? Hitler has... Who has done the most for the
small businessman? Not Thorez but Hitler!
During
the Occupation of France, he wrote letters to several collaborationist
journals, denouncing the Jews.[16] Even some Nazis thought Céline's antisemitic
pronouncements were so extreme as to be counter-productive. Bernhard Payr, the
German superintendent of propaganda in France, considered that Céline
"started from correct racial notions" but his "savage, filthy
slang" and "brutal obscenities" spoiled his "good
intentions" with "hysterical wailing".
When
Germany invaded the Soviet Union in June 1941, he expressed his support for
Jacques Doriot's recently founded collaborationist force Legion of French
Volunteers Against Bolshevism.
Céline's
writings are examples of black comedy, where unfortunate and often terrible
things are described humorously. While his writing is often hyper-real and its
polemic qualities can often be startling, his chief strength lies in his
ability to discredit almost everything and yet not lose a sense of enraged
humanity. Pessimism pervades Céline's fiction as his characters sense failure,
anxiety, nihilism, and inertia. Will Self has described Céline's work as an
"invective, which – despite the reputation he would later earn as a rabid
antisemite – is aimed against all classes and races of people with
indiscriminate abandon". The narrative of betrayal and exploitation, both
real and imagined, corresponds with his personal life. His two truest loves,
his wife, Lucette Almanzor, and his cat, Bébert, are always mentioned with
kindness and warmth.
Where
some critics see a progressive disintegration of personality reflected in the
stylistic incoherence of his books based on his life during the war (Guignol's
Band, D'un château l'autre and Nord), others claim that the books are less
incoherent than intentionally fragmented. They see the development of the style
introduced with Journey to the End of the Night continuing, suggesting that
Céline maintained his faculties in clear working order to the end of his days.
Journey
to the End of the Night is among the most acclaimed novels of the 20th
century.[citation needed] Few first novels have had a comparable impact.
Written in an explosive and highly colloquial style, the book shocked most
critics but found immediate success with the French reading public, which
responded enthusiastically to the violent misadventures of its petit-bourgeois
antihero, Bardamu, and his characteristic nihilism. The author's military
experiences in World War I, his travels to colonial French West Africa, New
York, and his return to postwar France all provide episodes within the
sprawling narrative.[26]
Guignol's
Band and its companion novel London Bridge center on the London underworld
during World War I. In London Bridge a sailboat appears, bearing the name King
Hamsun, obviously a tribute to Knut Hamsun, another collaborationist writer.
Céline's autobiographical narrator recounts his disastrous partnership with a
mystical Frenchman (intent on financing a trip to Tibet by winning a gas-mask
competition); his uneasy relationship with London's pimps and prostitutes and
their common nemesis, Inspector Matthew of Scotland Yard.[27]
Céline's
legacy survives in the writings of Samuel Beckett, Queneau and Jean Genet among
others. Jean-Marie Gustave Le Clézio, Robbe-Grillet, and Barthes expressed
admiration for him. In the United States, writers Charles Bukowski, Henry
Miller, Jack Kerouac, Joseph Heller, Kurt Vonnegut, Jr., William S. Burroughs,
Edward Abbey, Jim Morrison and Ken Kesey owe an obvious debt to the author of
Voyage au bout de la nuit, yet not in terms of style in writing, but as major
aesthetic, amoralistic influence.[28] Bukowski (who was of part-Jewish ancestry
himself) wrote "'first of all read Céline; the greatest writer of 2,000
years"[29] Céline was also an influence on Irvine Welsh, Günter Grass,
Karl Parkinson (The Blocks) and Raymond Federman.
Gaston Bergery
Nació
en París el 22 de noviembre de 1892.1
Gaston
Bergery estudió derecho antes de entrar
en el mundo de la política en 1918, como secretario de la Comisión de
reparaciones de guerra. Se mantiene en primera posición con una fuerte
atracción para los asuntos exteriores que permanecerán durante toda su vida, en
el centro de su agenda política.
Bergery,
que fue elegido diputado radical por Mantes en 1928, presentaba inicialmente
una ideología pacifista y europeísta;3 Philippe Burrin destaca el escaso
interés de Bergery en política nacional antes de 1932.4 En 1933 abandonó el
Partido Radical y fundó el Frente Común contra el Fascismo (Front commun contre
le fascisme),5 que en 1934 se trasformó tras fusión en el Front social.
Gaston
Bergery, fue señalado por Burrin junto a Marcel Déat y Jacques Doriot como uno
de los políticos franceses de diferentes ubicaciones ideológicas dentro de la
izquierda que experimentaron una «deriva fascista» en el periodo de
entreguerras:
El
movimiento que fundó Bergery, el «Frontismo», sufrió una derechización10 hacia
posturas fascistizantes. Fue también el fundador de una publicación de tipo
político, La Fléche.
jefe
del gabinete de Edouard Herriot en el Ministerio de Asuntos Exteriores de 1924
a 1925, se define en primer lugar como un hombre de izquierda. Al ingresar en
el Partido Radical, que resueltamente se opuso a cualquier colaboración con los
partidos de la derecha, se afirma abiertamente en contra de la Unión Nacional y
participa, junto con Pierre Mendes France y Pierre Cot, el grupo de
"jóvenes -turcs".
Elegido
como miembro de Seine-et-Oise en 1928, los conflictos con Édouard Herriot,
comienza a exponer en la galería del Palais Bourbon, el desarrollo del fascismo
y se ocupa de la evolución de la política exterior de Francia .
Convencido
de que la actitud del gobierno mantiene y promueve el nacionalismo alemán, que
está en contra de la ocupación del Ruhr, para la revisión del Tratado de Versalles
y el abandono de las reparaciones.
En 1932 fue reelegido y su participación en la
conferencia de Amsterdam le llevó a formar parte del mismo año, el movimiento
Amsterdam-Pleyel, el movimiento por la paz mundial, creado por iniciativa de
Romain Rolland y Henri Barbusse . El hebdomario Nuestro Mundo, dirigido por
Barbusse, y que cooperan, entre otros, Bertrand de Jouvenel, Daniel Guérin,
Philippe Lamour, le abre sus columnas.
En
marzo de 1933, abandonó el Partido Radical y fundó dos meses más tarde, el
Frente Común, en el que invitó a "todos los hombres de buena
voluntad" para luchar contra la guerra, contra el fascismo, por la
justicia social.
El día después del levantamiento nacional de 6
de febrero de 1934, abandonó su mandato de diputado, acusando a la mayoría que
quedo desde 1932, de no haber realizado su programa y, sobre todo, después de
haber cedido, durante los disturbios frente a la derecha y representantes del
fascismo en Francia.
Fue
el redactor de la llamada «declaración Bergery», firmada el 7 de julio de 1940
y presentada en la Asamblea Nacional el 10 de julio, que demandaba la
instauración de un nuevo orden autoritario,12 proclive a la colaboración con la
Alemania nazi.13 Durante el gobierno de Vichy, participó como
colaboracionista14 y Pétain le destinó como embajador a la Unión Soviética
(1941) y a Turquía (1942).
Juzgado en 1949, falleció en su ciudad natal
el 10 de febrero de 1974.
Escritor
francés
Cursó
estudios de Medicina. Fue movilizado en 1915 y en 1917. Después reanuda sus
estudios y a los veinte años ingresa como practicante en un hospital de París.
En
1919 André Breton funda con Luis Aragon y Philippe Soupault, la revista
Littérature, título sugerido por el propio Paul Valéry en alusión al último
verso de Arte poética del simbolista Paul Verlaine.
En
sus inicios escribió varias obras de carácter experimental, como la colección de
poemas Fogata (1920) Aventuras de Telémaco (1922) y el ensayo Tratado de estilo
(1928) donde expone su idea del surrealismo, que abandona por la estética del
realismo socialista.
Escribe
El mundo real nombre genérico que agrupa a Las campanas de Basilea(1933), Los
hermosos barrios (1936) y Los viajeros de la Imperial (1943) crítica de la
burguesía francesa de final de siglo. Louis Aragon es nuevamente movilizado en
1939 aunque en esta ocasión desertó y organizó una red de la Resistencia en el
sur de Francia. Condecorado con la cruz de guerra y con la medalla militar,
Louis Aragon emergió, a la caída del nazismo, no sólo como un héroe, sino como
"el único poeta de la guerra" en Francia.
Sus
versos fueron recitados una y otra vez en transmisiones "radiales",
en la Comedia Francesa y por las compañías francesas en jira por el mundo.
Entre ellos se popularizó principalmente la famosa "leyenda de Gabriel
Pén", escrita en el segundo aniversario de la muerte de Gabriel Pén,
publicada ilegalmente durante la guerra y repetida de memoria por los miembros
de la Resistencia, aun cuando contiene algunas inexactitudes como la de dejar
al héroe perdido en la fosa común del cementerio de Ivry, cuando en realidad
fue enterrado, en una tumba registrada, en Suresnes.
Los
poemas escritos durante estos años son La congoja (1941); Los ojos de Elsa
(1942) o Diana francesa (1945). Tras la liberación de Francia se edita su
novela Aurelian (1945) cuarto título de El mundo real, y que muchos consideran
una de las mejores obras del siglo XX. Su última novela de El mundo real, Los
comunistas (formada por seis volúmenes que se publicaron entre 1949 y 1951)
está considerada la más militante de Aragon.
Escribe
Novela inacabada (1956) poemas y relatos de corte autobiográfico; La semana
santa (1958) una novela histórica. Con Tiempo de morir (La sort de mourir,
1965) inicia una nueva etapa artística, a la que siguen Blanca o el olvido
(1967) o Teatro - Novela (1974).
Elegido
Académico de la Goncourt en 1967, dimitió al año siguiente.
Louis
Aragon falleció en París en 1982.
Françoise Giroud,
la journaliste
Françoise
Giroud, née Léa France Gourdji, est une journaliste, écrivaine et femme
politique française.
En
1937, elle commence à travailler comme scripte puis scénariste pour le cinéma.
Lors
de la Seconde Guerre mondiale, la jeune femme devient agent de liaison pour la
Résistance, ce qui lui vaut d'être arrêtée par la Gestapo et incarcéré à
Fresne. Elle confirme son engagement en s'opposant à la guerre d'Algérie. Son
appartement sera plastiqué.
En
1945, elle devient directrice du magazine Elle. Elle le reste jusqu'en 1953,
date à laquelle elle fonde L'Express avec son compagnon Jean-Jacques
Servan-Schreiber. Elle le dirige jusqu'en 1974.
En
1958, elle commence à écrire.
Elle
s'investit dans la vie politique. Membre du parti radical socialiste, elle
soutient Mendès-France puis Mitterrand. Elle devient secrétaire d'état à la
condition féminine (1974-76) puis à la culture (1977-79) pour Giscard
d'Estaing. Elle abandonne la politique en 1979.
Cette
même année associée à plusieurs intellectuels, elle fonde Action contre la
faim.
Non
réintégrée dans le groupe Express-Union, elle devient éditorialiste au Nouvel
Observateur pour lequel elle écrit depuis plusieurs années, et se consacre à l'écriture.
Elle
est resté pendant plusieurs années la seule femme à diriger un groupe de presse
en France.
En
1953, Françoise Giroud fonde le magazine L'Express avec son compagnon
Jean-Jacques Servan-Schreiber. Elle le dirigera jusqu’en 1974 et ce, en tant
que directrice de la rédaction, puis de la publication. Elle assure également
le poste de présidente du groupe Express-Union, entre 1970 et 1974. Aussi, lorsqu’elle décidera d’arrêter la politique, c'est tout
naturellement qu'elle retournera à l'écriture. Elle
sera également éditorialiste du Nouvel Observateur pendant vingt ans.
Françoise
Giroud, nacida Leah Gourdji Francia, es una periodista, escritora y política
francésa. En 1937, comenzó a trabajar como guionista para el cine.
Durante
la Segunda Guerra Mundial, la joven se convirtió en enlace para la resistencia,
lo que le valió para ser detenido por la Gestapo y encarcelada en Fresne. Se
confirmó su compromiso de oponerse a la guerra en Argelia. Su apartamento será
volado.
En
1945, se convirtió en directora de la revista Elle. Queda hasta 1953, cuando
fundó L'Express con su compañero Jean-Jacques Servan-Schreiber. Ella la dirige
hasta 1974.
En
1958, empezó a escribir.
Está
involucrada en la política. Miembro del Partido Radical Socialista, es
compatible con Mendes-France y Mitterrand. Se convierte en Secretario de Estado
para la Condición de la Mujer (1974-1976) y la cultura (1977-1979) por Giscard
d'Estaing. Ella dejó la política en 1979.
Ese
mismo año asociada con varios intelectuales, fundó Acción contra el hambre.
No
es reinstalada en el Grupo Express-Unión, se convierte en columnista del New
Observer, donde escribe desde hace varios años, y se dedicó a la escritura.
Se
mantuvo durante muchos años como la única mujer que dirige un grupo de prensa
en Francia.
También
asume la presidencia del grupo Express-Unión entre 1970 y 1974. Además, al
decidir dejar la política, es natural que ella volverá a la escritura.
Asimismo, fué editorialista del Nouvel
Observateur durante veinte años.
Françoise Giroud,
la femme politique
Françoise
Giroud est une femme d’action. Ses performances en
tant qu’agent de liaison durant la Seconde Guerre mondiale lui ont d’ailleurs
valu une arrestation par la Gestapo. Elle s’oppose à la guerre d’Algérie et
adhère au parti radical socialiste. Bien qu’elle ait soutenu Pierre
Mendès-France puis François Mitterrand, elle rejoint le gouvernement de Valéry
Giscard d'Estaing pour la modernisation sociale que celui-ci promet.
Il
aura cependant fallu plus de vingt ans à Françoise Giroud pour intégrer un
poste de secrétaire d'État à la Condition féminine (juillet 1974 et août 1976).
Elle sera également secrétaire d'État à la Culture jusqu'en mars 1977. Le
scandale de la médaille de la Résistance en 1977 mettra fin à ses ambitions
politiques.
Françoise
Giroud es una mujer de acción. Su actuación como oficial de enlace durante la
Segunda Guerra Mundial también le gano un arresto por la Gestapo. Se opuso a la
guerra de Argelia y se unió al Partido Radical Socialista. A pesar de que el
apoyo Pierre Mendès-France y François Mitterrand, se unió al gobierno de Valery
Giscard d'Estaing para la modernización social que prometió .
Sin
embargo, le tomó más de veinte años a Françoise Giroud integrar una Secretaría
de Estado para la Condición de la Mujer (julio 1974 y agosto de 1976). Será
también secretario de Estado de Cultura hasta marzo de 1977. El escándalo de la
Medalla de la Resistencia en 1977 pone fin a sus ambiciones políticas.
Françoise Giroud,
l’écrivain
Françoise
Giroud quitte la scène politique en 1979 et se tourne définitivement vers
l’écriture. En effet, elle est l’auteur de plus d’une vingtaine de livres,
notamment le « Tout Paris » édition Gallimard, « Nouveaux Portraits », « Dior
», « Parlez-moi d’amour » ou encore « Cœur de Tigre » sorti en 1994. Les livres
de Françoise Giroud épluchent la société française. Essais, biographie, romans
à succès, critiques..., ses œuvres parlent des coulisses du monde politique, de
la vie en société, d’amour et de l’évolution des mœurs.
Elle
a également écrit des textes de chansons et a collaboré à des émissions
télévisées et à plusieurs œuvres cinématographiques. Françoise Giroud a fait
partie d’un groupe d’intellectuels français. Les citations de Françoise Giroud
sont nombreuses.
Intitulé
« Les taches du léopard », son dernier livre est sorti en 2003. Enfin,
Françoise Giroud est également le sujet principal du livre de Christine Ockrent
: « Françoise Giroud, une ambition française », sorti aux éditions Fayard en
2003
Françoise
Giroud salio de la escena política en 1979 y se volvió definitivamente a la
escritura. De hecho, ella es autora de más de veinte libros, entre ellos
"Todo París" edición Gallimard, "Nuevos retratos",
"Dior", "Háblame de amor" y "Corazón del tigre"
lanzado en 1994. los libros de Françoise Giroud son la cáscara de la sociedad
francesa. Pruebas, biografía, novelas populares, críticos ... Sus obras hablan
de las escenas de la política, de la vida social, el amor y la evolución de la
moral.
Ella
también escribió letras de canciones y colaboró en programas de televisión y
varias películas. Françoise Giroud era parte de un grupo de intelectuales
franceses. Las citas de Françoise Giroud son muchas.
Titulado
"Las manchas de leopardo", su último libro salió en el 2003. Por
último, Françoise Giroud es también el tema principal del libro de Christine
Ockrent "Françoise Giroud, una ambición francesa", publicado por
Fayard en 2003
Jean-Jacques
Servan-Schreiber
Periodista de raza, hombre polifacético, profeta de una modernidad tecnológica, jugó un papel determinante en la configuración de las sociedades europeas de la posguerra, tanto en el campo de los medios de comunicación: como fundador en 1953 del semanario L'Express, como en su faceta de ensayista, especialmente a través de El desafío americano, un libro publicado a finales de la década de 1960 del que se vendieron cientos de miles de ejemplares.
JJSS,
como se le conoció en sus momentos de gloria, también se dedicó a la política.
Refundó el Partido Radical y fue el ministro más breve de Valery Giscard
d'Estaign. Llevaba más de una década retirado y padecía una enfermedad
neurológica degenerativa, lo que no le impedía, según aseguró ayer su hijo
Franklin, leer la prensa, revisar la gran literatura y L'Express. Los últimos
años de su vida activa los dedicó a la enseñanza en la Universidad Carenegie
Mellon, de Pittsburg, en Estados Unidos.
Ingeniero
de formación, pese a proceder de una familia de periodistas, fue piloto de caza
en las fuerzas de la Francia libre durante la II Guerra Mundial, aunque no
llegó a entrar en combate. Tras la contienda, con tan sólo 25 años, el fundador
de Le Monde, Hubert Beuve-Méry, le hizo editorialista de política
internacional, lo que no le impidió ejercer de responsable de prensa del
socialista Pierre Mendes-France.
Fue
el proceso de derrumbe del imperio colonial francés, primero con la guerra de
Indochina y después con la terrible guerra de Argelia, lo que le llevó a fundar
en 1953, junto a Françoise Giroud, el semanario L'Express. El éxito fue
inmediato. Además de ejercer una crítica implacable del poder, llenó un vacío
en la sociedad francesa y conectó con las corrientes de pensamiento que
emergían en la Europa de la posguerra. Por sus páginas pasaron escritores de la
talla de Albert Camus, François Mauriac o Jean-Paul Sartre, pero también
nombres menos conocidos y más heterodoxos que introdujeron temas, entonces
novedosos, como el feminismo.
En
1970 abandonó la dirección de L'Express para lanzarse a la arena política. Para
entonces ya había publicado El desafío americano (1967), el libro que analizaba
la penetración de las multinacionales estadounidenses en Europa, y que más allá
de la simple denuncia, funcionaba como exégeta de un modelo de modernidad. En
la ola del éxito de El desafío americano Servan-Schreiber visitó España.
Concretamente dio una multitudinaria conferencia en la Facultad de Derecho de
la Universidad de Barcelona. Su presencia elegante y sus ideas liberales, contrastaban
enormenente con la tensa grisura de aquellos momentos marcados por el Estado de
excepción y el Proceso de Burgos.
Durante
la década de 1970, Servan-Schreiber se lanzó abiertamente a la política. Asaltó
el languideciente Partido Radical y se convirtió en su presidente, consiguió un
escaño de diputado por Nancy y se autoproclamó representante de la región de
Lorena. Crecido, en las siguientes elecciones disputó el escaño de Burdeos al
entonces primer ministro, el gaullista Jacques Chaban Delmas. Y mordió el
polvo. Pero su momento de gloria -por más que efímero- estaba aún por llegar.
En
1974, Valery Giscard d'Estaing, recién elegido presidente de la República, le
llamó para que ocupara el Ministerio de las Reformas. Duró sólo 12 días en el
cargo, que abandonó alegando incompatibilidad con la política nuclear del
presidente. En 1977 se vendió L'Express y en 1980 escribió El desafío mundial,
otro ensayo en el que analizaba la llegada de la informática a la vida
cotidiana y las consecuencias de la revolución tecnológica.
A finales de la década de 1980 se instaló en
Pittsburg junto a su familia ejerciendo como profesor en la universidad. A
mediados de la década pasada empezó a sufrir los efectos de una enfermedad
neurológica degenerativa. Su último artículo data de 1996. Su última aparición
pública fue en 2003, para asistir a los funerales de Françoise Giroud.
En
los últimos tiempos vivía en las afueras de París junto a su mujer Sabine y sus
hijos. El presidente Jacques Chirac, de quien fue breve ministro, le calificó
ayer de "apasionado de las ideas nuevas y de la acción",
"político de estilo innovador y brillante ensayista".
*
Este artículo apareció en la edición impresa del Miércoles, 8 de noviembre de
2006
Jean Jaurés
Raoul
Villain
Placa
conmemorativa en el Café du Croissant: "Aquí, el 31 de julio de 1914, Jean
Jaurès fue asesinado."
Tumba
de Jean Jaurès en el Panteón de París.
El
asesinato de Jean Jaurès, influyente político socialista y pacifista francés,
fue cometido en el Café du Croissant en París tres días después del inicio de
la Primera Guerra Mundial, el 31 de julio de 1914 a las 9:30 pm. El asesino
Raoul Villain, quien iba a ser juzgado y absuelto luego del armisticio en 1919,
le disparó tres veces.
Este
acontecimiento puso fin a los esfuerzos socialistas para parar la ya casi
inevitable guerra. La mayoría de la izquierda francesa, antes opuesta al
inminente conflicto, se unen a la patriótica Unión Sagrada, incluso muchos
sindicalistas y miembros de la Sección Francesa de la Internacional Obrera.
La
posterior absolución de Raoul Villain en 1919 precipita el fin de este
movimiento. Y el traslado de las cenizas de Jaurès al Panteón de París en 1924,
marca una nueva brecha política en la izquierda entre los comunistas y los
socialistas.
Bibliografía
François
Broche, "Jaurès, Paris 31 juillet 1914" (Jaurès, París, 31 de julio
de 1914), Balland, Paris, 1978.
François
Fonvieille-Alquier, Ils ont tué Jaurès ! (¡Mataron a Jaurès!), Robert Laffont,
Paris, 1968.
Jean
Rabaut, 1914, Jaurès assassiné (1914, Jaurès asesinado), ed. Complexe,
Bruxelles, 2005. ISBN 2-8048-0051-2
Jean
Jaurès, cuyo nombre completo era Auguste Marie Joseph Jean Léon Jaurès
(*Castres, Francia, 3 de septiembre de 1859 – París, 31 de julio de 1914), fue
un político socialista francés.
Biografía
Miembro de una familia burguesa de provincias,
obtiene el número uno en el acceso a la Escuela Normal Superior de la calle de
Ulm en 1878 y el número tres en la oposición a la cátedra de filosofía en 1881.
Ejerce como profesor en primer lugar en Albi, y más adelante en Toulouse en
1882 en donde ejercerá su cátedra de maestro de conferencias en la Facultad de
Letras
Jean
Jaurès
Jean
Jaurès arenga a los obreros bajo una bandera roja
La
huelga de Carmaux
Jaurès
vive distanciado de la vida política nacional cuando estalla en 1892 la gran
huelga de las minas de Carmaux. El alcalde electo, Jean Baptiste Calvignac,
sindicalista y socialista, minero, es despedido por el marqués de Solages con
la excusa de que ha faltado a su trabajo para cubrir sus necesidades de
representante municipal. Los obreros se ponen en huelga para defender a ese
alcalde del que se sienten orgullosos. La República envía al ejército, 1.500 soldados,
en nombre del «derecho al trabajo». Parece que la República se pone de parte de
la patronal monárquica contra los huelguistas. Francia está sumida en el
escándalo de Panamá. Jaurès ya no es capaz de sentirse identificado con una
República que parece ser que muestra su auténtica cara en la que diputados y
ministros capitalistas priman a las finanzas y a la industria sobre el respeto
a las personas: Carmaux y la mina serán el trampolín político que buscaba.
Lleva a cabo el aprendizaje de la lucha de clases y del socialismo. En una
huelga a la que entró como intelectual burgués republicano social sale como
socialista convencido.
Diputado
socialista
Bajo la presión de la huelga y de Jaurès, el
gobierno arbitra el pleito entre Solages y Calvignac en favor de este último.
Solages dimite de su escaño de diputado. De modo lógico, los obreros de la
cuenca minera designan diputado a Jaurès: ya no será un obrero, sino un burgués
el líder de los mineros. La oposición del voto rural no impide su elección.
Jaurès se consagra a la defensa continua y resuelta de los obreros en lucha. En
Albi está entre los que participan en la famosa «vidriería obrera». En el
Languedoc vitícola visitará a los vendimiadores libres de Maraussan, que crean
la primera bodega cooperativa.
Al
principio del caso Dreyfus, Jaurès no toma partido con claridad. Sin embargo,
como consecuencia de la presión popular, y también gracias al fervor de las
jóvenes promociones de las Escuelas Normales, Jaurès y los socialistas toman
partido claramente por Alfred Dreyfus.
Se opone por esa época a los marxistas
ortodoxos, cuyo líder, Jules Guesde, para quien Dreyfus es un oficial burgués,
por lo que su defensa no se estima prioritaria. Para Jaurès, el cúmulo de
desgracias e injusticias de las que Dreyfus es víctima borra las diferencias de
clase. La cuestión no es si Dreyfus es un privilegiado o un explotador: es un
hombre que sufre injustamente y los socialistas deben oponerse a cualquier
injusticia. Jaurès funda el periódico l'Humanité en 1904.
En 1905, participa en la fundación de la SFIO,
que unifica, bajo presión de la Internacional, las distintas tendencias
socialistas de Francia. A pesar de que reconoce la lucha de clases, para
Jaurès, sólo hay una humanidad, y el hombre de izquierdas debe implicarse por
la República en una revolución democrática y no violenta. Se opuso al
colonialismo y se enfrentó contra la intervención francesa en Marruecos.
En
1911 escribe abogando por la enseñanza en las escuelas del occitano, el bretón
y el euskera.
Internacionalista pacifista
Combatía
el peligro de la guerra europea con pasión, especialmente tras el estallido de
las Guerras Balcánicas en 1912-1913. Se opuso a la ley que alargó a 3 años el
servicio militar obligatorio. Ante el ultimátum austríaco contra Serbia, tras
el asesinado del Archiduque Francisco Fernando en Sarajevo, Jaurès se distanció
de la ola chauvinista que crecía y en su discurso en Lyon, el 23 de julio de
1914, culpó de la "situación terrible" a "la política colonial
de Francia, la política hipócrita de Rusia y la brutal voluntad de
Austria". Llamó a los obreros de todos los países que estaban al borde de
enfrentarse en la guerra, a unirse para alejar "la horrible
pesadilla".
Su toma de postura en pro del pacifismo, poco
antes del desencadenamiento de la Primera Guerra Mundial, le hicieron impopular
entre los sectores nacionalistas y un exaltado fanático le asesinó, en el Café
du Croissant de la calle Montmartre de París, una semana después de su
discurso, y tres días antes de que se iniciaran las hostilidades. Su asesinato
no fue producto de la casualidad, sino el último eslabón de una campaña de
odio, mentiras y calumnias que mantenían contra él sus enemigos. Este
asesinato, por otro lado, consiguió sus objetivos, puesto que facilitó la
incorporación de la izquierda a la «Unión sagrada», especie de gran coalición
nacional de guerra.
Al
finalizar la I Guerra Mundial y como reacción a la masacre que ocasionó, muchos
municipios franceses colocaron a calles y plazas su nombre, recordando su papel
de firme opositor a dicho conflicto. También el Metro de París puso su nombre a
una de sus estaciones.
Su
asesino, Raoul Villain, tras 56 meses de detención preventiva, fue liberado el
29 de marzo de 1919.
(París,
1840 - 1902) Novelista francés, principal figura del naturalismo literario.
Hijo de Francesco Zola, ingeniero emigrante italiano, y de Émilie Aubert,
proveniente de la pequeña burguesía francesa, pasó su infancia en
Aix-en-Provence y estudió en el colegio Bourbon. Fue compañero de Paul Cézanne,
con quien mantuvo una sólida amistad, y tomó contacto con la literatura
romántica, especialmente con la narrativa de Victor Hugo y la poesía de A. De
Musset, su favorito.
Al
morir su padre en 1847, se trasladó a París junto a su madre y continuó sus
estudios en el instituto Saint-Louis. Tras fracasar en su examen de graduación,
en 1859 consiguió un empleo administrativo en una oficina de Aduanas y en 1862
empezó a trabajar para el departamento de publicidad de la editorial Hachette.
Se interesó por la poesía y el teatro, y colaboró para periódicos como Le
Figaro, Le Petit Journal y Le Salut Public.
Émile
Zola
Sus
primeros libros publicados fueron un conjunto de relatos titulados Cuentos a
Ninon (1864), y una novela autobiográfica con influencia del romanticismo, La
confesión de Claude (1865). Escribió dos obras de teatro que no fueron
representadas, La fea (1865) y Magdalena (1865), y en 1866 fue despedido de
Hachette. Comenzó a trabajar como cronista literario y artístico en el periódico
L'Événement, y publicó los trabajos de crítica pictórica Mis odios (1866) y Mi
salón (1866), donde hizo una enérgica defensa de Manet, cuestionado en esa
época por los sectores académicos.
A
partir de ese momento se dedicó por completo a escribir, se alejó
paulatinamente del romanticismo y sintió afinidad con el movimiento realista y
el positivismo. Aplicó su experiencia periodística en Los misterios de Marsella
(1867), una novela folletinesca, y publicó su primera obra importante, Teresa
Raquin (1867), con la que ganó cierto prestigio en el ambiente literario.
Con
la novela Madeleine Férat (1868) fue consolidando su estilo, y la lectura de
Introducción a la medicina experimental, de Claude Bernard, lo inspiró para
concebir un conjunto de novelas escritas "con rigor científico",
donde quería relatar la historia natural de varias generaciones de una familia
bajo el Segundo Imperio.
Así
nació la monumental serie Los Rougon-Macquart, integrada por La fortuna de los
Rougon (1871), La ralea (1871), El vientre de París (1873), La conquista de
Plassans (1874), La caída del Abate Mouret (1875), Su excelencia Eugène Rougon
(1876), La taberna (1877), Una página de amor (1878), Naná (1879), Lo que se
gasta (1882), El paraíso de las damas (1883), La alegría de vivir (1884),
Germinal (1885), La obra (1886), La tierra (1887), El sueño (1888), La bestia
humana (1890), El dinero (1891), La derrota (1892), y El Doctor Pascal (1893).
En
los treinta y un volúmenes que comprenden las veinte novelas trazó la
genealogía de más de doscientos personajes y sus textos fueron tan elogiados
como criticados. Recibió duros cuestionamientos por parte de escritores
católicos como M. Barrès, L. Bloy y B. d'Aurevilly que veían en el carácter
positivista de su obra signos de decadencia, dogmatismo y una "absoluta
carencia de espiritualidad".
Su
obra ensayística comprende volúmenes teóricos sobre el naturalismo, como La
novela experimental (1880), El naturalismo en el teatro (1881), Nuestros
autores dramáticos (1881), Los novelistas naturalistas (1881), Documentos
literarios (1881), y Una campaña (1882); así como textos de crítica y polémica,
entre los que destacan Viaje de vuelta (1892), Nueva campaña (1897), y
fundamentalmente ¡Yo acuso! (1898), un extenso artículo dirigido al Jefe de Estado
francés y publicado originalmente en el periódico L'Aurore, donde defendió la
inocencia del capitán de origen judío A. Dreyfus, acusado de alta traición a la
patria por los militares antisemitas.